Es su espacio de alegría, emoción...
donde pueden jugar libremente
con sus ideas sin prejuicios,
con sus ocurrencias
sucedidas por risas y carcajadas.
Es su espacio para aprender
por qué los saltamontes
saltan como ellos.
Es su alternativa de tranquilidad
en una estresante sociedad.
Es su lugar para aprender
por qué la tierra y el agua
forman el lugar perfecto
para meter las manos y los pies
en una día de sol brillante...
Es su refugio increíble
en sus primeros pasos tiernos
de estos capullitos,
rebosantes de esperanza.
rebosantes de esperanza.
En Los Andes peruanos,
ésta es
la escuelita democrática.
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen